Prof. Gabel Daniel Sotil
García
INTRODUCCIÓN
“Tradicionalmente el término POBREZA se relaciona con una deficiente disponibilidad de recursos
económicos que afecta a una persona, familia, grupo humano, etc. Ser pobre, se
piensa, es carecer de dinero para cubrir la atención de las necesidades
básicas. Es decir, bajos niveles de ingresos y de consumo, que imposibilitan el
acceso a los servicios de salud, de saneamiento, de educación y de trabajo.
Pero, esa
percepción de la POBREZA, hace mucho que ha sido superada. Los análisis
socio-económicos, las nuevas tendencias socio-políticas, la revolución en los
criterios socio-jurídicos, etc. vienen proporcionándonos elementos teóricos
para ver a la pobreza como un concepto multidimensional, menos simplista, más
elaborado.
Hoy, la
POBREZA es concebida como un problema sumamente complejo, de carácter
histórico-cultural, político-económico y ético-jurídico.
Por ello es
que POBREZA significa también, además de lo dicho, la incapacidad de las personas para ejercer y
hacer valer todos sus derechos; es carecer de participación en las
decisiones o en las acciones que
orientan el vivir como ser social; es la falta de oportunidades para ejercer
ampliamente las propias capacidades y habilidades; es no poseer medios para
asegurar y vivir la propia cultura, la
identidad propia, la etnia propia o la condición propia de ser hombre, mujer o
niño/niña. La pobreza significa vivir sin calidad de vida.” (Artículo:
“Las caras de la pobreza”, en este mismo blog).
Con este trasfondo
doctrinal, hacemos entrega de una serie de artículos con la que pretendemos
colaborar con la creación de una nueva educación para nuestra región.
“EN
LA ESCUELA APRENDEMOS A CONOCER NUESTRA COMUNIDAD”
REFLEXIÓN
El conocimiento de la
comunidad es de suma importancia para que los educandos se ubiquen progresiva y realistamente en su entorno ecológico y sociocultural, de acuerdo con su edad.
Para que tomen conciencia
plena, analítica y crítica, del lugar en que
hacen su vida cotidiana.
Si bien este conocimiento
lo pueden lograr a partir de libros o documentos escritos, ello no excluye la
observación sistemática de la misma, más aún cuando es muy poco el material
escrito que se refiera a la realidad específica de su comunidad, porque, como
sabemos, la realidad amazónica aún no ha sido abordada en los libros que
circulan en el sistema educativo actual.
Además, la lectura de la realidad tiene una gran
importancia para el inicio en la lectura
de libros, textos, etc. y encierra un gran potencial de estimulación de las
capacidades de niñas y niños, por la necesaria activación de todos sus sentidos
para la captación de los muy diversos aspectos de ella.
Es, precisamente, ésta tu
labor: orientar a los niños y niñas para que conozcan bien su comunidad,
pueblo, caserío y su entorno ecológico a partir de
un contacto gradual, ordenado e integral. Con lo cual instalamos en ellos un
referente sólido para el despliegue de sus potencialidades y para la seguridad
que requiere su desarrollo afectivo.
En
este sentido tienes muy diversas posibilidades para actuar, esforzán- dote para
que este conocimiento sea hecho de acuerdo a la edad y grado de tus
educandos.
Ello requiere que TÚ mismo
hagas un especial esfuerzo para mirar la realidad comunal de una manera integral; es decir, superando
el nivel empírico que tienen los niñas y niñas y que no les permite asumir su
complejidad, ni tampoco actuar para transformarla en el marco de los
proyectos de desarrollo.
En tu condición de maestra
(o) debes buscar la bibliografía que te permita enriquecerte acerca del
conocimiento de la realidad: aspectos que comprende, criterios para hacer su
análisis, estrategias para actuar sobre ella, evolución (cambios) a través del
tiempo, actores o agentes, acciones más trascendentes, etc. En este mismo blog
dispones de una relación de productos literarios e intelectuales escritos
acerca de nuestra región.
Además, debes hacer un esfuerzo para sistematizar tu propio
conocimiento de la comunidad y profundizarlo en la medida de tus posibilidades
recurriendo, si es necesario, a las personas e instituciones que puedan
ayudarte en el logro de dicho propósito.
SUGERENCIAS:
Planifica acciones para
que los niños y niñas salgan a observar, en forma sistemática, a su comunidad,
pidiéndoles, de acuerdo a su edad, que grafiquen (mediante croquis o dibujos)
la ubicación de casas, calles, cochas, tipishcas, sacaritas, restingas, bajiales,
sembríos, bosques, caños, trochas, senderos, caseríos próximos, iglesias,
tiendas, etc. para que los describan, dibujen, expongan y organicen
excursiones, de ser posible, a su iniciativa.
Para ello podrías invitar a los vivientes que tengan información
diversa de la comunidad.
Que analicen la situación
actual y comparen con la de épocas anteriores.
Que puntualicen los aspectos que han cambiado precisando sus causas y
causantes. Que averigüen si la caza, la pesca y la extracción de los recursos
siguen iguales o cómo y en qué han variado. Al igual que las actividades
económicas, culturales, sociales, etc.
Que reconstruyan su
historia comunal, los personajes que tuvieron un rol importante en la vida
social, sus acciones, etc.
Rescata la memora de los
usos y costumbres de la comunidad preguntando a los vivientes más antiguos qué
comían, qué celebraban, cómo se divertían, etc.
Que observen los recursos
naturales: la diversidad de animales, aves, peces, reptiles, mariposas,
árboles, alimentos, plantas medicinales, plantas ornamentales, plantas
peligrosas; así como los fenómenos climáticos: creciente, vaciante, lluvias,
tempestades, etc.
Que observen los
amaneceres, atardeceres; que relacionen unos objetos con otros, unos fenómenos
con otros.
Todo esto estimulará su
capacidad de observación, su habilidad para describir, su capacidad de
razonamiento y expresión, su sensibilidad ante los mensajes de su entorno, su
capacidad de establecer relaciones de causa a efecto y se darán cuenta que la
realidad tiene un orden, que hay leyes y principios que se cumplen, etc. pero
que, también, las personas podemos alterar, muchas veces en perjuicio de
nosotros mismos.
Que se hagan preguntas y
busquen las respuestas acerca de los hechos naturales, sociales y culturales de su comunidad; la
organización de las familias, los roles sociales que cumplen diversas personas:
padres, madres, vendedores, profesionales, trabajadores, etc.
No olvides que cuanto más
conozcan los niños y niñas a su pueblo, más
lo AMARÁN; por lo tanto, será más
fácil que se comprometan a hacer esfuerzos para que mejoren sus condiciones. En este sentido, tu orientación es de trascendental importancia.
Las actividades de
aprendizaje de acuerdo con los objetivos del currículo y tus unidades de
aprendizajes debes desarrollarlas en el
marco de estas sugerencias y otras ideas que nazcan de tus experiencias. En
cuanta oportunidad tengas, incentiva la autonomía de tus alumnos; que aprendan
a tomar decisiones por sí mismos, sin esperar tus órdenes. Trata de que no se formen dependientes.
Nota: Fotos del autor.