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Iquitos, Loreto/Maynas , Peru
- Nací en el departamento Ica, Provincia Palpa, Distrito Río Grande, Caserío "San Jacinto", 1941. Egresado de la UNM "SAN MARCOS", Facultad Educación, especialidad de Filosofía y Ciencias Sociales, Docente Facultad Ciencias de la Educación y Humanidades-UNAP. Colaboro en: - Diversas revistas que se publican en Iquitos DISTINCIONES •PALMAS MAGISTERIALES, Grado de Maestro •PREMIO NACIONAL DE EDUCACIÓN “HORACIO”, 1991, Derrama Magisterial. •PREMIO NACIONAL EDUCACIÓN, “HORACIO”, 1992, Reconocimiento Especial •DIPLOMA RECONOCIMIENTO DE LABOR POR PUEBLOS INDÍGENAS- AIDESEP •PREMIO NACIONAL I CONCURSO NACIONAL LIT. INFANTIL, ÁREA EXPR. POÉTICAS, MED •RECONOCIMIENTO MÉRITO A LA EXCELENCIA Y PRODUCCIÓN INTELECTUAL -UNAP. . Reconocimiento con la distinción "LA PERLITA DE IQUITOS", UNAP (2015), Reconocimiento por SEMANA DEL BOSQUE, Sub-Ger. Prom. Cultural, GORE LORETO., Condecorado con orden "CABALLERO DEL AMAZONAS" por el GORE LORETO (06.07.16), condecorado con la orden "FRANCISCO IZQUIERDO RÍOS", Moyobamba, San Martín (24-09-2016). Palmas Magisteriales en grado AMAUTA (06-07-17) MINEDU. DIPLOMA DE HONOR, por Congreso de la República. 21-03-2019

jueves, 3 de noviembre de 2011

NOVIEMBRE EN LA REGIÓN OMAGUA



LA EMERGENCIA DE LAS AGUAS (*)

N
oviembre  se construye desde el fondo de los lechos de nuestros ríos y cochas.

Surgen sus días al compás de la emergencia lenta de las aguas, que escalan las riberas para volver al bosque amado, impulsadas por fuerzas que vienen desde las entrañas de la Madre Tierra.

En la alternancia deleitosa de días grises, abrigados por férreos mantos de nubes, con aperturas luminosas de los cielos amazónicos, noviembre avanza renaciendo en las hojas y flores de los árboles prodigiosos  que  nos regalan el deleitoso perfume de los primeros y sabrosos mangos.

Lento ascenso de las aguas
Y es que noviembre se construye  silenciosamente cada noche para amanecer al pie de nuestras puertas y ventanas, fulgurante a veces, gris y triste otras.








Y así, conjugando el tiempo y el bosque, nos entrega el verdor de los árboles, el azul  del cielo infinito y el discurrir multiforme de las aguas que fluyen en los cauces cargando hojas, ramas y flores que juegan con palizadas de troncos, gramalote y huamas, mientras se deslizan lentamente en el viaje sin retorno.

En una de sus noches,  en las playas más lejanas, el ciclo germinativo de las charapas se completa en los profundos nidos por ellas excavados,  para dar vida a nuevos seres que quieren disfrutar de este mundo maravilloso.
 
Ellas sólo esperarán una noche bravía y tempestuosa, de lluvia en torrentes, con rayos, truenos y relámpagos, para salir en eclosión feliz, a expresar su alegre y reverente  saludo a la vida.

En el encuentro feliz con el agua de los ríos y las cochas, las charitos se incorporan  a esa  proverbial diversidad de vida, haciéndola más bella aún cuando se solean displicentes en los troncos y  cantos  de los ríos en las horas en que calienta el sol.


La naturaleza se esmera en presentarse en múltiples ropajes exóticos para ofrecernos su belleza, que parece renovarse cada día en creación continua para nuestra suprema complacencia.

Es así que, en sus noches apacibles, la luna llena se deleita contemplándose en las cochas y tahuampas de remota soledad y, en las tardes borrascosas, se dibuja la figura solitaria de una garza que otea la ignota inmensidad, adornando el encanto de los árboles enhiestos que desafían la indomable tempestad.

LAS CHARITOS

Cobijados por la arena
que su madre colocó,
los huevitos en el nido
tuvieron que esperar.
Eclosión de las crías de charapa (charitos)

El sol les dio calor,
las lluvias, humedad
Y el tiempo silencioso
los hizo germinar.

Hoy ya son charitos
Que salieron a la luz
Luciendo muy graciosas,
Su alegría de vivir.

Veloces van corriendo
Cruzando el arenal
Alegres van buscando
el agua celestial

Su gracia nos seduce
Y también nos compromete
 Pues ellas son riqueza
que debemos proteger. 

 Una lluvia prematura empieza a refrescar el ambiente anhelante de frescor y la tierra sedienta la absorbe presurosa para calmar su calor.

Preparando la fariña
Los peces esperan que se abran las puertas de las cochas, tahuampas y tipishcas para recuperar presurosos los dominios que tuvieron que abandonar, pero ya están depositando sus huevos en los primeros gramalotes y hojarascas, a la espera de la oportuna fertilización que asegure su reproducción.

Es noviembre el mes en que se cierra el círculo en la dinámica hídrica de nuestra región, pues en la sierra de nuestro país ya aparecen las primeras nubes anunciando las lluvias, cuyas aguas nos han de llegar muy pronto recorriendo los inumerables cauces  de ríos y riachuelos de  estos verdes espacios, en los cuales las lluvias y el calor  se combinan en perfecta armonía para generar un escenario propicio para el ser humano, las plantas y los animales en la mayor diversidad imaginable.

(*) Tomado del libro:"OMAGUA, canto al reino de las aguas y los árboles", del Prof. Gabel D. Sotil G.

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